Otra forma de vivir

Hace poco que empecé a valorar la libertad en su justa medida. A disfrutar de pequeñas cosas que tiempo atrás me habrían parecido casi absurdas y desde entonces, siento que mi vida ha tomado otra dirección, la mía y día tras día hallo sorpresas que me hacen sonreir de la misma manera que los niños que me cruzo por la calle.

Me gustaría que este blog sirviera para compartir la alegría de vivir y contagiar esta extraña enfermedad que me aqueja al mayor número de personas posible. Iré colgando reflexiones sobre las historias más curiosas que me vaya encontrando, maneras diferentes de afrontar problemas comunes, cuentos ambientados en mundos que todavía no se han descubierto, truquitos para que la men sana se encuentre en un cuerpo igual de sano, frases de esas que funcionan a modo de pepito grillo y nos ayudan en determinados momentos, poesías y libros que me gustan, un poco de todo.

Quisiera no poner barreras a mis sueños,
quisiera ser un artista del vivir.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Como el turrón en navidad

O lo que es lo mismo, he vuelto.

Llevaba semanas en otro mundo, bastante lejano a este, quizá intentando hacer demasiadas cosas, robándole horas al sueño. Durante el día, un velo de cansancio cubría mi mente, volviéndome más lento, más torpe. Cada noche dormía menos hasta que al fin llegó el sábado, terminé al mismo tiempo con todo aquello que me impedía dormir y hoy, tras ocho horas de sueño vuelvo a sentirme yo mismo. En realidad lo sentí ayer por la noche de camino a la habitación, cuando la decisión de descansar estuvo tomada.

Se supone que la cara y el cuerpo son el espejo del alma y pese a no haber dormido ni una cuarta parte de lo recomendado por las autoridades sanitarias, me siento mejor que nunca, deseoso de retomar las rutinas de entrenamiento, lectura, escritura, trabajo y alimentación, un poco abandonadas pero no olvidadas.

Podemos dejar de dormir durante un tiempo, pero solo eso. Cada vez se nos hace más difícil pensar, disfrutar, decidir, terminar los trabajos a tiempo, relacionarnos adecuadamente...por eso, siempre que se pueda hay que procurar respetar las horas de sueño en lo posible, no dejarse seducir por planes alternativos porque el mañana acaba por llegar.

No hay comentarios: