Otra forma de vivir

Hace poco que empecé a valorar la libertad en su justa medida. A disfrutar de pequeñas cosas que tiempo atrás me habrían parecido casi absurdas y desde entonces, siento que mi vida ha tomado otra dirección, la mía y día tras día hallo sorpresas que me hacen sonreir de la misma manera que los niños que me cruzo por la calle.

Me gustaría que este blog sirviera para compartir la alegría de vivir y contagiar esta extraña enfermedad que me aqueja al mayor número de personas posible. Iré colgando reflexiones sobre las historias más curiosas que me vaya encontrando, maneras diferentes de afrontar problemas comunes, cuentos ambientados en mundos que todavía no se han descubierto, truquitos para que la men sana se encuentre en un cuerpo igual de sano, frases de esas que funcionan a modo de pepito grillo y nos ayudan en determinados momentos, poesías y libros que me gustan, un poco de todo.

Quisiera no poner barreras a mis sueños,
quisiera ser un artista del vivir.

lunes, 31 de diciembre de 2007

Idea82: retroceder para seguir avanzando

A veces somos muy duros con nosotros mismos.

Deseamos vivir hacia adelante, dejar atrás aquello que nos duele. Nos negamos a dar un solo pasó en otra dirección que no sea el frente.

Creo que hay pequeños traspiés, pasos atrás que nos pueden impulsar con más fuerza hacia adelante.

A veces a quién más cuesta perdonar un error es a uno mismo.

Seamos indulgentes con nosotros, ya que todo lo que hacemos tiene su porqué.

Lo que hay que callar...

Siempre hay algo que callar.

Cuando comencé el blog omití que el escribir aquí venía motivado por una ruptura sentimental, dejé a un lado sentimientos para centrarme en otros. Ni siquiera los escribí entre lineas, simplemente no lo escribí. De la misma manera hoy callo otras cosas, las que quizá en un futuro encuentren su lugar en está página.

Siempre hay más de lo que parece

FELIZ AÑO NUEVO

Entramos en el año 2008.
Viajando en tren esta mañana al observar la fecha en el móvil me ha dado la impresión de vivir en un futuro, en el final del año 2007. Parecía que no llegaría el año 2000, todavía recuerdo las olimpiadas de 1992, las fechas ya pasadas de en las que se ambientaban films futuristas y mañana será ya 2008.
Cómo pasa la vida.
Supongo que estos son días de valoraciones.
Para mí el 2007 ha sido un año de cambios profundos, en lo referente al trabajo, al amor, a la vida. Suena a tópico decir que me he encontrado a mí mismo y a mentira si tenemos en cuenta el nudo en el estómago que me acompaña estas últimas horas, pero algo de eso ha habido.
Quizá no sea el lugar apropiado para decirlo, pero creo que lo tengo todo, que no podría pedir más.
Me siento sano, cada día más fuerte, descubriendo una sensibilidad hasta hace poco latente, amante y amado por los que de verdad importan, afortunado en el trabajo, tan cerca de mis sueños que no sé donde empiezan y donde termina la realidad.
He descubierto también la libertad y eso ha desencadenado todo lo demás.
Ser feliz no es estar siempre contento, pero ser libre es ser siempre yo.
Un único deseo, que encontréis el valor suficiente para amarrar vuestra libertad, para soñar sin límites y luchar por ello, sin miedo al dolor, viviendo por y para vosotros, por y para el amor.

idea81: el poder del continuará

Desde siempre se ha utilizado el continuará para atrapar hasta la próxima semana al seguidor de una serie, de un cómic.
La fórmula de dejar al héroe expuesto a una muerte segura durante 7 días nos empuja a volver a encender la tele y presenciar su salvamento.
¿Por qué no utilizar la misma estrategia en otros aspectos?
En lugar de entrenar, de estudiar hasta la extenuación hacerlo dejando ese poquito más para otro día, ese continuará...en el que la mente se predispone a volver al siguiente entrenamiento, la siguiente sesión de estudio con un extra de ganas.
Lo mismo ocurre con la persona amada. A veces espear un poco para verla nos hace explotar de ganas y convierte el reencuentro en una fiesta de fuegos artificiales.
Continuará...

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Esclavos del dinero(2)

Cuando un joven decide dejar de estudiar y ponerse a trabajar muchos son los padres que lo apoyan, empujados por el miedo a que su hijo sea un vago, bajo el lema "por lo menos así tendrá para sus gastos".
¿Sus gastos?
Trabajar toda la semana para poder comprarse ropa el sábado por la tarde, salir de fiesta derrochando dinero esa misma noche. Sus gastos. Videojuegos y si a caso...un coche. Y ahí está la trampa.
En ese mismo momento el joven ha empeñado su libertad. Ya no es libre para dejar de trabajar pues ha contraído una deuda y antes de acabar de pagarla llegarán deudas mayores, como una casa.
Toda su vida tendrá que trabajar para pagar las deudas que ha contraído, atrapado en un trabajo y en un lugar.
Así se acalla a los revolucionarios de hoy día. Un sueldo jugoso a los 20 años y alos 25 cuando ya has abierto los ojos es tarde, ya te has casado con tus deudas.
Serás el consumista ideal para el capitalismo. Nada exigirás en conjunto, ninguna mejora social, demasiado preocupado por tus deudas y por tu trabajo habrán callado tu voz por una PS3 y por un coche que no puedes conducir más que el sábado.
Piénsatelo dos veces antes de contraer una deuda. Valora tu libertad en su justa medida y recuerda que vida no hay más que una.
Los nacidos en el primer mundo tenemos la oportunidad, el privilegio, de elegir qué queremos ser, de estudiar aquello que deseamos, por lo que miles de millones de personas del planeta matarían.
No despreciemos esa suerte, estudiemos, exijamos mejor educación, sueldos dignos, molestemos al sistema ¡seamos revolucionarios!

Esclavos del dinero(1)

Hay quien no tiene nada y es feliz.

Hay quien no tiene mucho y trata de vivir por encima de sus posibilidades, eternamente entrampado.

Hay quien tiene miles de millones y viaja rodeado de asesores, anclado a su teclado y a su dinero, esclavo de su riqueza.

Hay quien con la misma fortuna se pasa el día en la piscina, en buena compañía.

Haber hay de todo.

La vida es tiempo y el tiempo es dinero.

¿Cuántos han empeñado su vida para ahorrar un pequeño montón de dinero que al final recaerá en sus "amadas" nueras?

¿Qué más da tener 60.000, 90.000 ó 150.000 euros en la caja de ahorrros, cambiará eso nuestra vida, nos permitirá dejar de trabajar, cambiar de residencia, cambiará algo de lo esencial?

Y con la navidad...

Estas fechas me dejan un sabor agridulce.
Envidio a los niños que todavía lo son, aguardando que el gordo de turno (papa noel, el olentzero, a los reyes magos) les traiga sus tan ansiados regalos.
Pero los que desgraciadamente dejamos de serlo hace ya tiempo nos enfrentamos a las compras de última hora y somos a la vez víctimas de ellas. Todos los años nos pasa lo mismo. No sabemos qué regalar, lo que nunca nos planteamos es dejar de regalar.
¡A consumir!
Es un tema tan manido que apenas quiero dedicarle vuestro tiempo.
Solo deciros que mi familia este año ha decidido celebrar tan solo la nochebuena y la nochevieja, dejando navidad y año nuevo para los fervorosos creyentes.
Puede que sea tan solo el principio y que pronto vivamos estas fiestas como realmente las siento: días sin ir a trabajar.

domingo, 23 de diciembre de 2007

El principito

¿Lo habéis leído?

Entonces no podéis saber lo que os perdéis.

Cientos de veces lo vi en el estante de una librería sin sentir demasiada curiosidad por él.

Una vez leí las primeras páginas en una gran superficie y me pareció interesante.

Hace unos días econtré un ejemplar en casa, subrayado por mi madre cuando tenía 11 añitos.

"no se ve bien con el corazón, pues lo esencial es invisible a los ojos".

La frase esta tatuada sobre un espejo que cuelga junto a fotos de mis padres desde antes de que yo naciera. Esas palabras me han acompañado siempre, me han hecho pensar sobre la manera en la que mi madre ve la vida.

Hasta hoy no he sabido de dónde provenían.

Si no tenéis costumbre de leer es un buen libro para engancharse a la lectura.

Si no os gusta, si os parece que carece de profundidad...preocuparos, ocuparos y postocuparos por vosotros.

LEED LAS ENTRADAS ANTIGUAS!!

Si continuáis hacia abajo en la página encontraréis un link que os llevará a las viejas entradas.

Sin menospreciar ninguna creo que las mejores están al principio, por lo menos la mayoría de las que más han influido en mí.

Para muestra un botón:

- las ventajas de no enfadarse nunca y la manera de plantearlo como un ejercicio de inteligencia.
- Repetir una acción durante 21 días crea un hábito y hasta dónde te puede llevar.

...

Hay de todo, echad un vistazo.

Ayer releí los títulos y hoy me he dado cuenta de que me encuentro en el sexto día de repetición de una acción muy positiva para mí.

Curiosamente he dormido como no recordaba haber hecho jamás. El despertar ha sido tan dulce y suave que era incapaz de imaginar la hora que era.

sábado, 22 de diciembre de 2007

idea80: planes alternativos

El oráulo de Éforo le prohibió a Leónidas ir a la guerra contra el grandioso ejercito persa.

"La ley es la ley".- se decía, pero esa respuesta no tranquilizaba su espíritu.

Caída la noche, su mujer al verlo atormentado decidió darle la respuesta en forma de pregunta (en parte para que el rey se centrara en lo que se tenía que centrar):

"No pienses en lo que haría un rey, un espartano o un ciudadano, piensa en qué haría un hombre libre".

De la misma manera dos mil años después de aquella conversación de alcoba, ante un par de días que en los que puedo decidir qué hacer en cada momento me hago la misma pregunta:

"¿Qué haría un hombre libre?"

Mi plan, el que de verdad me apetece y por fortuna está a mi alcance, puede que no coincida con el de nadie más esta noche y en el día de mañana.

La vida en libertad, lejos de compromisos sociales y tabús...es otra cosa.

idea79: Mortalidad y lotería

Millones de personas sueñan con que su boleto de lotería les cambie la vida.

Quizá por un momento perdamos la perspectiva.

Es más probable que durante estas fiestas nos atropelle un coche, nos hagamos picadillo dentro de uno, nos atragantemos por las uvas, nos de un ataque al corazón, un navajazo en nochevieja, una explosión de gas,...todo eso es más probable que llevarse un premio jugoso en la lotería de navidad.

Así que puede que el premio ya lo hayas ganado y no te ocurra ninguna de esas desgracias, quizá no sean tus últimas navidades pero por si acaso trataría de compartirlas con la gente a la que quiero y sobretodo a la que amo.

Cuando quedes a tomar un café con esa persona, piensa que podía no haber más veces, pues para todo hay una primera y una última vez.

"Disfruta".

sábado, 15 de diciembre de 2007

idea78: ¿Por quién te cambiarías?

Camino por la calle en bicicleta y al cruzar la carretera un espectacular deportivo me corta el paso. Una pareja se aburre en el parque, un grupo de amigos ríen en la cafetería, un carnicero afila sus cuchillos, una mujer lee en el tren...

¿Por quién te cambiarías?

Puede que una forma de saber cómo somos sea averiguar a quién envidiamos.

viernes, 14 de diciembre de 2007

idea77: pequeños y grandes problemas

A veces no sé distinguir, excitarme hasta un punto con una pequeña desavenencia, filtrarla desde el principio, darme cuenta de que no se trata de un asunto vital.

Pero cuando no hay grandes problemas alrededor es difícil relativizar los pequeños, son todo lo que tenemos y nuestra sorpresa, tristeza, tienden a sus límites sin saber que se trata de pequeñeces, que deberían reservarse a los grandes males.

Incluso me atrevería a decir que no es mala idea la de ignorar algunos pequeños problemas, no enzarzarse en peleas absurdas, perder ciertas batallas por no luchar en ellas, si vemos que en realidad tampoco nos sacudirán la vida.

Esto vale solo para aquellos pequeños problemas que hayan perdido sus dientes de leche, que hayan finalizado su etapa de crecimiento, que no puedan convertirse en grandes problemas.

martes, 11 de diciembre de 2007

idea76: Este ciego no mira para atrás.

Mientras volvía en autobús a casa de mis padres me iba quedando dormido, siguiendo con la mirada las gotas de lluvia que corrían en diagonal por el cristal.
Al pasar por Donostia he pensado en que una vez viví allí, he imaginado de una manera fugaz el pasado de la mujer a la que amo y mi mente, como si fuera algo ajeno a mí, me ha aconsejado dirigir mis pensamientos hacia adelante.
No puedo si no escucharla.
El presente merece toda nuestra atención, el futuro cercano puede acoger nuestros sueños y el pasado ha de quedar relegado a las risas y los suspiros.
Pues lo que nos enseña ya forma parte de nosotros, no es necesario regodearse en él.
Lanzo una pregunta al aire, la que todos nos hemos hecho alguna vez, la que me gustaría contestar con un silencio y una mirada soñadora:
"Qué será de mí..."

jueves, 6 de diciembre de 2007

idea75: No acunes los libros!

Cuántas veces habré oído:

"Cuando tenga una casa montaré una gran biblioteca!"

¿Pero para qué?

¿Cuántos libros has releído en tu vida?


Que conste que me encantan los libros, de hecho no me importaría en absoluto dedicarme a escribir y a leer los libros de otros, pero no entiendo esa necesidad de mimarlos, de conservarlos hasta el fin de nuestros días cuando es muy posible que no los volvamos a utilizar.

Por ello he comenzado a regalar los que ya me he leído, o a dejarlos en un banco con un post-it que reza:

"si no me vas a leer no me cojas"

También a no comprar más libros, a utilizar los que están en las bibliotecas, centros cívicos, en posesión de amigos.

Aunque he de confesar que suelo comprar libros en el mercado de la Plaza Mayor los Domingos, la mayoria son robados y se encuentran cosas diferentes a lo que se oferta en las grandes superficies.

Pero aún así, los leo y los subrayo, aquel pasaje, palabra, frase, que me ha resultado especialmente interesante, para que cuando algún día lo ojee pueda volver a ella. La verdad es que compré uno que estaba subrayado y con el siguiente hice lo propio y no me arrepiento.

No acunéis los libros, leedlos y compartirlos, sin amontonarlos en una estantería, no les hacéis ningún favor.

idea74: nunca el tiempo es perdido

El tiempo dedicado a uno mismo nunca es tiempo perdido.

A veces, cuando vemos que los nervios se agolpan en el estómago y el trabajo nos lo permite, conviene alejarnos del mundo y plantarnos a solas el tiempo que haga falta hasta ponernos en orden.

En mi caso ha consistido en comenzar a leer de nuevo, a hacer algo de ejercicio, descansar y alimentarme bien, para que el cerebro funcione correctamente en un cuerpo en el que se encuentre a gusto.

Pero sobre todo ponerme en orden yo, mientras limpiaba y ordenaba la casa.

Y después de mí respecto a los demás.

Las soluciones, las conclusiones han ido llegando, he ido viendo las cosas claras y he podido tomar decisiones que al menos a corto plazo me han reportado buenas sensaciones y resultados positivos.

idea73: se consciente de lo que te fastidia

Discutes con tu pareja sin saber muy bien porqué. Te sientes enfadado, como si todo te molestara. Al tiempo descubres que en realidad lo que ha provocado tu desagrado es no haber hecho el amor con ella.

Así de simples somos a veces.


Tienen un mal detalle con nosotros, tratamos de no darle importancia, pero más tarde nuestro comportamiento con esa persona es arisco y saltamos enseguida.

Que no se nos olvide que era por ese mal detalle.

Porque los seres humanos tendemos a darle mil vueltas a nuestros sentimientos, al ¿porque me he enfadado, qué significa que me enfade, es que ya no la quiero? y cosas parecidas. Son solo ejemplos.

Creo que si conseguimos ser conscientes de lo que nos fastidia, podremos entendernos mejor y ahorrarnos esa serie de pensamientos que no conducen a nada simpelemente porque parten de una premisa errónea.

Sé lo que me jode.

idea72: acota tu vida

En estos últimos días he cometido una serie de errores que tienen un rasgo en común.

No he sabido que cada parte de mi vida ocupe un lugar y un momento determinado, he ido arrastrando un todo a todas partes, haciendo que pesen, que me cansen y además sin tomar cada una por separado y encontrar soluciones.

En realidad cuando las trato por separado los problemas que derivan de ellas se esfuman sin más.

Pero todas juntas me impiden tener la mente despejada, abierta a lo que me pueda ofrecer un momento determinado.

Por ello trataré de acotarlas, de redirigir una vez más mis pensamientos, de hacer un esfuerzo real por conseguirlo.

Cuando no existe más problema que el peso de las ideas en la cabeza.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

idea71: No verbalizar, no revivir.

Necesito descansar.
Quizá por ello me parezca que pequeñas ideas parasitarias (ver idea al respecto) se me suben por la chepa y no me libro de ellas tan fácilmente como otras veces.
Por ello necesito de un segundo nivel de seguridad que preserve mi buen estado de ánimo.
No hablar de esos temas. No verbalizarlos.
Hablar viene bien de vez en cuando pero en ocasiones no sirve más que para revivir, o para preocupar a los tuyos, que le pueden dar hasta más importancia que tú mismo.
Una manera de enterrar estas ideas es tratar de no pensar en ellas. La otra sería dejar de hablar de ellas.
Me comprometo a cumplirlo.

idea70: Garra de Jaguar

Pequeños problemillas ocupan mi cabeza, la llenan de mierda hasta los tobillos, se olvidan de la suerte que tienen de haber nacido aquí, de tener esta oportunidad de disfrutar de la vida, la libertad, la salud...

Entonces recuerdo que soy Garra de Jaguar:

"Yo soy garra de jaguar.
Este es mi bosque.
Mi padre cazó en él con su padre y cazó conmigo cuando su padre se fue.
El día de mañana cazaré en este bosque con mi hijo y él seguirá cazando en él cuando yo me haya ido"


A los que no hayáis visto la película Apocalipto no os dirá demasiado.

A mí me recuerda que la vida son dos días, que hay que aprender a disfrutar de las cosas buenas, no tender a complicarlas, porque las malas llegan sin avisar y no tienen porqué darte una segunda oportunidad.

Vive el momento, vive de verdad.

Se Garra de Jaguar.

Cuando queráis quedamos paara verla. Es imprescindible.

idea69: la distancia necesaria

Va en relación con la idea anterior.

Al final se trata de seguir siendo uno mismo, de preocuparse de uno, de no olvidar de quién ha de ser la persona más importante en tu vida, de no perder el norte.

Qué fácil se cambia el rumbo.

A veces hay que poner una pequeña distancia emocional, aunque sea con la persona a la que amas, si no quieres que el amor te consuma.

En su ausencia dedicarte a ti, disfrutar del tu tiempo, de ti mismo y de esa manera sin saber muy bien porqué, disfrutar más de ella.

idea68: sacar petróleo de las piedras

O tú dominas a tu mente o tu mente te domina a ti.

A veces gana ella durante un rato.

Me despierto mirando al techo, pensando en lo que voy a hacer en cuanto me levante y mi cuerpo se niega a responder.

Entonces me olvido de mí y comienzo a especular sobre un par de frases que me dijo alguien que me importa de verás, a razonar, a intentar meterme en su mente, a buscar los porqués y en ese trance mi mente no me deja salir.

Dejo de ser yo por unos instantes, de ser mi centro, mi dueño, de ser libre y de ser feliz, todo al mismo tiempo.

¿Y de qué sirve? de nada.

A eso me refiero con intentar sacar petróleo de las piedras. De un par de frases trato de construir un mundo, que para colmo no es el mío.

No me hace ningún bien.

Por eso trato de hacer un esfuerzo, me levanto de la cama sin pensarlo demasiado y hago algo sencillo, como escribir un poco, poner algo de música (me siento bien de Hombres G me arranca una sonrisa) y friego los platos mientras mi mente se aburre de que no le hagan caso y vuelve a caer en mis dominios.

El tiempo dedicado a uno mismo nunca es tiempo perdido.

sábado, 1 de diciembre de 2007

idea68: tiempo, tiempo, tiempo

Creo que merece la pena repetir la importancia de darse tiempo para aquellas cosas realmente vitales.

Estuve meses dudando si dejar o no un trabajo que no me hacía sentir bien. Estuve a punto de hacerlo pero me di tiempo y con él comprendí que no era el trabajo en sí, si no otras cosas que lo rodeaban lo que me producían malestar. Superé una pequeña tristeza que me duro unos meses, cambié esas pequeñas cosas poco a poco y hoy por hoy el trabajo parece otro, disfruto realmente con él.

De la misma manera, quizá de forma paralela, sufría con mi relación de pareja al no recibir todo lo que daba en forma de amor. Tras mucho tiempo en aquella situación decidí exponérselo y darle "un tiempo" para que viviera sin mí y se diera cuenta si de verdad me quería o no.

Bien, de eso hace algo más de tres meses y en ese tiempo no he tenido noticias de ella más que unas cuantas llamadas, eso si muy cariñosas, pero nada más. Vivo a una hora y media de ella y no ha venido, no ha tenido tiempo de verme, por el trabajo dice, ni de mandarme una carta, ni de volver conmigo.

Durante años pensé y no llegué a ninguna conclusión y ahora el tiempo me ha arrojado la verdad a la cara.

Me ha enseñado a valorar lo que recibes de alguien y a dedicar tu vida a aquellos que te dedican la suya, dejando de regalarla a quienes te dicen que te la regalan.

El tiempo te da perspectiva, te da la razón o te la quita.

Curioso elemento el tiempo (Jarabe de Palo)

sábado, 24 de noviembre de 2007

idea67: escucha a los demás

Últimamente no leo mucho, pero por otro lado no dejo de aprender.

Siempre he escuchado a los demás, aunque también me ha gustado mucho hablar.

Ahora procuro escuchar mucho más, soy más egoista y aprender lo que pueda.

De todo el mundo puede aprenderse algo pero principalmente me gusta escuchar a la gente mayor que yo, sea cual sea su clase social, pues los sabios no suelen llevar largas barbas.

Hoy me han dado un buen consejo, me ha servido casi al instante para solucionar una situación bastante molesta con soltura.

Además a la gente le suele gustar contar sus experiencias, necesitan hablar y con un poco de paciencia se puede extraer algo bueno.

Si encima como es el caso quien te da el consejo observa el fruto en ti, habrás hecho un amigo y eso, no tiene precio.

idea65: eso tan infrecuente llamado amor

Alguien me dijo hace tiempo, pensando en voz alta sobre lo que había sido su vida, que enamorse lo que se dice enamorarse, se había enamorado dos o tres veces, y que no le parecía que el resto de la gente hubiera tenido más suerte que él.

Esas palabras calaron en mí más de lo que él cree. Quizá ni siquiera fue consciente de su importancia.

En aquel mommento me quería decir que no buscara el amor, que era algo infrecuente y que me conformara con menos, supongo que en un intento de evitarme sufrimiento y ofrecerme una visión real de las relaciones de pareja.

Pero mi cabeza miró hacia otro lado.

De lo que dijo concluí que el amor es algo raro y que cuando aparece hay que estrujarle el corazón.

La vida es finita.

La ciencia estudia cómo ser feliz

En una revista de tu bar he leído que en Estados Unidos les ha dado por estudiar a la gente feliz, para buscar denominadores comunes.

Han encontrado desde superdotados a personas normales que eran felices.

Todos habían pasado por momentos difíciles que habían superado.

Todos vivían el momento con gran intensidad, tenían una perspectiva real de la vida y asumían
lo inevitable con sentido del humor.

Hagamos ciencia!

qué más da el lenguaje, qué más da la voz

Durante años me han irritado las faltas de ortografía, me he jactado de no cometerlas.
Durante años se han reido de mi voz al cantar.

¿Es que no tiene derecho a expresarse el analfabeto?
¿Es que no tiene derecho a cantar el desafinado?

¿Qué más dará el lenguaje, qué más dará la voz?

Si la verdad, lo esencial es invisible a los ojos, a los oídos.

Si los sentimientos, lo que somos no entienden de sintaxis, de graves y agudos.

Dedicado al profesor de Filosofía y a la canción de Atahualpa Yupanqui, la pura verdad.

idea64: sentimientos y decisiones

Hay ciertos momentos en la vida en las que los sentimientos se vuelven incompatibles con la vida misma, en la que sabemos, aunque no queramos admitirlo, que de continuar caminando en la misma dirección nuestros pasos nos llevarán a la locura, al sufrimiento.

A veces sabemos que no hay final feliz y que hay que tomar una decisión, que no basta con dejarse llevar, con el día a día y ver qué ocurrirá.

Se trata de respeto a los demás y a nosotros mismos.

Se trata de simplificar la vida, de decidir y ser consecuente con nuestra decisión.

¿Decidir en base a qué, a la lógica, a la comodidad, a los sentimientos?

Puede que lo más real sea decidir en base a lo que no queremos perder, en función de lo que nos dolería más desprendernos.

Al pensar en estos términos podemos incluso darnos cuenta de lo que tenemos, de que ya lo hemos perdido o de que estamos a punto de hacerlo. Podemos darnos cuenta de que podríamos perderlo todo, decidirnos por la nada y...que no pasaría demasiado.

Podemos sentir.

Decidir en un momento determinado, anticipándose a la tragedia final, a lastimar a una persona que queremos, a minimizar daños propios y ajenos, además de valiente puede ser beneficioso.

Oscar Wilde me parece que dijo una vez, refiriéndose a los personajes que amaba y que acabarían por no formar parte de la versión final de su obra:

"Hay que aprender a matar a los seres queridos"

Toda mi energía para quien haya entendido esta entrada, para quien se encuentre en esta situación.

La vida en un pestañeo ó idea66:vuelve a la tienda

Supongo que en la vida hay muchas otras cosas pero ahora sólo se me ocurre el amor.

Cómo lo vivimos, cómo lo afrontamos, lo amarramos, o lo esquivamos.

Temores...

Una mujer de veinte años tenía docenas de pretendientes. Los hombres eran caprichos, juguetes, diversión. Tuvo novios y uno le gustaba por encima del resto.

Un hombre mayor que ella, regentaba una tienda de comestibles, le regalaba caramelos, miradas y palabras mágicas. Hubo besos, abrazos y un día un pequeño enfado. Ella no volvió a la tienda.

Durante años desterró su recuerdo en lo más profundo de su alma.

Se casó, tuvo seis hijos, dos murieron antes de nacer, uno un poco después.

La vida pasó y un día, de la mano con su nieto miró hacia un balcón y vio a un anciano que años atrás fue el dueño de una tienda y de algo más. El hombre se levantó con dificultad, la miró fijamente, hermosísima como estaba con aquel vestido, era primavera. Sus sobrinos tuvieron que ayudarle a sentarse.

Murió sin haberse casado nunca.

El nieto creció hasta hacerse mayor que lo que era ella cuando abrazaba al tendero en la trastienda.

Un día la anciana le hizo una confesión.

Tenía pesadillas, soñaba con él. Una vida después había comprendido que era el único hombre al que había amado en su vida, el que había dejado escapar por una tontería.

Nieto y abuela pensaron y hallaron una solución.

Buscaron su tumba entre cientos y al final la hallaron. Llovía.

Ella se ocultó tras un árbol pero se empapó igualmente. Su nieto se subió a la tumba que estaba en una altura, retiró el musgo mientras no dejaba de llover, la adecentó para su abuela y colocó las flores que le habían comprado.

Ella estuvo enferma varios días, pero durmió mejor que en mucho tiempo.

Cada cierto tiempo volvieron a aquel lugar. Ponían flores en varias tumbas y en esa, que era su secreto, también.

La vida ya ha pasado para ella, el nieto piensa en su historia y en vivir en su carne la segunda oportunidad de su amada abuela.

Viviré por y para el amor. Volveré a su tienda.

Anónima...

No sé cómo encontraste este rincón de palabras perdidas, ni recuerdo cuál fue la primera vez que te dejaste caer. Podría volver a mirarlo pero hoy no lo haré.

Cuando alguien comienza un poema y lo lanza al vacío no sabe quién lo leerá.

Un amigo me confiesa que la página ha ido evolucionando, que cada vez se parece más a mí, a cómo soy, a cómo siento. De alguna manera se han ido reflejando mis subidas y bajadas, mis idas y venidas.

Al leer tus últimos comentarios, los que contesto desde aquí, me he dado cuenta de que ambos estamos creciendo mientras se suman las palabras, seguimos viviendo, días mejores, otros peores, decisiones, dudas, temores.

Tu silencio sigue al mío.

No me entorpeces, enriqueces mi camino. Me obligas a esforzarme, le das una vuelta de tuerca a mis pensamientos y yo le doy la segunda en mi cama.

Cuando quieras volver a escribir aquí estaré

jueves, 22 de noviembre de 2007

idea63: a leer

Para leer hay que estar descansado, algo relajado, sin pájaros en la cabeza, por lo menos no de esos que vuelan en círculo y graznan ante el olor pútrido de la carne. No acabo el libro que empecé hace mucho, cuando tengo tiempo escribo en lugar de leer y no cuentos, sobre mí, sobre esto y lo otro, palabras que tampoco conducen a demasiado menos cuando van dirigidas a otras personas que necesitan de ayuda por escrito.

Leer, creo que me lo voy a tener que tomar como una obligación o no lo haré y es una pena. Es el cansancio, es la mente que se evapora y huye de la estructura ósea que la conenía.

Quedaré con el libro, no hace falta ponerse guapo, solo quedar e intentar no quedarme dormido.

En la cama está siendo complicado. Ya me veo en una cafetería leyendo un rato, diez páginas, que ya serán diez páginas más que lo que leí ayer.


miércoles, 21 de noviembre de 2007

idea62: las respuestas que vienen sin más.

Desde siempre me ha caracterizado por darle mil vueltas a todo, por tratar de deducir biblias enteras de un par de frases y algún gesto. Me he pasado media vida pensando y escribiendo sobre este tipo de cosas y sinceramente, las conclusiones a las que he llegado dejan bastante que desear, son esencialmente insustanciales.

Es de un tiempo a esta parte cuando me he dado cuenta que las verdaderas respuestas, cuyas preguntas ni siquiera te atreves a plantear en voz alta, llegan sin más.

El paso del tiempo, de los días, de los meses, te arroja la verdad a la cara, arrancándote una lágrima y en la mayoría de los casos, una sonrisa.

No digo que haya que ser una seta inconsciente que no reaccione ante lo que le pase, que no piense en nada, no. Pero cuando se reflexiona duramente sobre algo, cuando notamos que el cerebro se recalienta y no conseguimos si no hacernos daño, creo que es mejor darnos una tregua.

A veces (como ya dije en su momento ahora que lo pienso bien), la respuesta viene sin más.

Si es una idea repetida lo siento, pero la verdad es tan importante (a mí me lo parece), que no debería de importar releerla, a mí al menos no me importa reescribirla.

El poder destructivo de un recuerdo

Hay que ver como una fragancia o una simple palabra, pueden hacer que toda nuestra grandeza desaparezca y no nos quede nada más que esconder la cabeza entre las manos, vapuleados por un recuerdo.

Esta vez ha sido pensar en la palabra "transparente".

Solo una persona en este mundo comprende el significado que esa palabra tiene para mí.

Cuando el pasado y el presente se chocan de esta manera me quedo sin habla, sin frase mágica que me devuelva al momento inmediatamente anterior en el que sabía dónde estaba.

Quizá sea momento de echarse a dormir.

sábado, 17 de noviembre de 2007

idea61: ¿Cuánto se puede hablar por teléfono?

Si, señoras y señores, existe un límite lógico que puede calcularse como sigue.

No depende de aquello que tengan que decirse, porque "tener" es el verbo más relativo entre los verbos.

Porque respóndanme a esta pregunta ¿alguno de ustedes ha recibido una llamada importante en alguna ocasión?

Yo, tampoco.

Volvamos al asunto del tiempo al teléfono. ¿De qué depende entonces?

Única y exclusivamente de la distancia. Es directamente proporcional a ella.

Imaginemos que la persona con la que habla vive (o se encuentra, en el caso de móviles) a unos veinte minutos (dependiendo del sistema de transporte elegido), el tiempo límite por tanto serán esos veinte minutos más un extra de 5-10 minutos que lleva adecuar la vestimenta a la climatología y según el caso, ducharse.

Todo lo demás debería estar prohibido ¿Por qué?

Porque no es más que pereza, podrías estar y no estás, simplemente por comodidad.

Y al igual que una imagen vale más que mil palabras, un minuto de compañía real vale más que 21 minutos al teléfono.

Imaginemos que luego tendrían que volver al punto de partida pongamos, por una cita, entonces el tiempo límite de hablar por teléfono sería de 40 minutos, pero ni un minuto más.

¿Se imaginan qué diferente sería el mundo si aplicásemos esta sencilla regla?

Idea60: lo que no hay que decir

A mí me pasa siempre, o al menos, lo siento así.

Hay cosas que pienso que antes de decirlas, mientras se deslizan por mi boca ya veo que no las tenía que haber dicho. Podría poner ejemplos, pero seguro que cada uno encuentra los suyos.

La conversación puede ser muy larga, pongamos por teléfono, una hora charlando, diciendo esto, callando lo otro y pum, dices una de esas cosas y al colgar, todo lo demás ha desaparecido, solo queda ese detalle que no puedes borrar.

Quisieras volver a llamar e hipnotizar a la persona para que lo olvide, volver al momento antes de decirlo, pero ya es tarde.

Entonces ya que no puedo ir hacia atrás vuelo hacia adelante.

Imagino que pasaría si no lo hubiera dicho.

Nada, de acuerdo.

Una vez dicho algo te vuelves esclavo de tus palabras.

Si no lo dices esclavo de tus silencios.

y no es fácil discernir cuando has de optar por una opción y cuando por la otra.

Para eso se inventaron los ojos, para que digan la verdad.

Por eso hablar por teléfono, dista mucho de ser lo ideal.

Ojos de pantera

Ojos verde pantera.

Pero ni son verdes, ni pertenecen a una pantera.

Aún así hacen que te sientas como si te mirara un felino que puede atacarte en cualquier momento.

Nació en Brasil, pero si le cantas "Brasiil...." se enfada muchísimo, porque sus padres, toda su familia es chilena.

Es un huracán, capaz de ver, volver y remover, de caminar hacia adelante y cambiar de dirección sin dar ninguna explicación, a nadie.

No regala sonrisas más que cuando decide que es necesario. Y su criterio no tiene porque coincidir con el tuyo.

De un extremo a otro en un segundo, de convertirse en una sombra invisible a que todo el mundo sienta su presencia.

¿Y con qué sueña?

Con recorrer el mundo cámara en mano, acabar con la publicidad desde dentro, triunfar en el teatro.

Un diamante negro de afilados bordes que duerme hasta el mediodía y no sabe despertarse sin música.


idea59: al ponerte a trabajar.

Creo que algunos de los problemillas mentales que nos acompañan a diario provienen de no saber interpretar las propias sensaciones. Pensamos que tal desazón se debe a una cosa, extraemos conclusiones precipitadas y resulta que puede que no sea así.

En mi caso, ahora me doy cuenta que lo que de verdad me carcomía por dentro era ponerme a trabajar, tener que terminar una investigación a la que hoy sábado, cuando no hay nadie en la universidad (o casi nadie, que siempre queda algún colgado como yo), voy a darle un buen achuchón.

Qué tranquilidad darme cuenta de que los nervios en la boca del estómago venían de ahí, es como quitarte dos problemas a la vez.

Si termino la investigación (en la que llevo bastante retraso), creo que voy a tener que someterme a cirugía para quitarme la sonrisa de la boca.

idea58: queda contigo.

Ha sido parar un momento, escribir unas lineas, poner algo de música, comenzar a hacer cosas automáticas como preparar la ropa para la lavadora, barrer, ducharme y desayunar. Todo lo que creía real ha sido desplazado por la verdadera realidad.

Como siempre las sensaciones, las buenas, llegan sin que las llames y lo cubren todo, por ello creo que es mejor darse algo de distancia con nuestra propia mente y dejar que las respuestas acudan sin más.

Por cierto, no sé si la música de Fito habrá tenido algo que ver.

viernes, 16 de noviembre de 2007

idea57: vive la magia

Hoy ha sido un día de cambios, de buenas intenciones. He decidido recuperar mi centro, trabajar más, demostrarles a los míos que estoy loco por ellos.

Y aunque la idea era buena, llegada la hora de la verdad, me sentía incapaz de trabajar, de centrarme en nada tangible y únicamente fluía entre letras primero, con la música después.

Hoy no he hecho nada productivo, nada que se vaya a reflejar en mi curriculum, al menos de una manera positiva.

Pero el día me ha dado mucho. Me ha acercado a los míos, a unos y a otros.

Un amigo me ha contado que en cuanto le hicieran el contrato se haría pareja de hecho, dándome pie a reflexionar sobre mi propia vida casi sin esfuerzo.

Le he escrito una carta a mi padre diciéndole todo lo que siento por la vida y por él.

Una segunda carta para quién está pasando una mala racha con su novia, ilusionado porque mis malas experiencias le sirvan para extraer buenas conclusiones. También ahí he comprendido mejor mi propia vida.

La amistad, el cariño, la confianza, el poder ser yo mismo en diferentes lugares.

Pasear por aquí y por allá.

Quizá hoy no haya sido lo que se esperaba que fuera pero solo me resta decir que ha sido infinitamente mejor.

Mañana será otro día.

jueves, 15 de noviembre de 2007

Ideas que sirven para todo (II)

Continuando con el pensamiento anterior fijemos en primer lugar, objetivos sencillos que nos acerquen a nuestro centro. Lo primero que acude a mi mente son los horarios.
La rutina matutina de afeitado, ducha y desayuno está tan implantada en mí que la hago sin pensar mientras escucho la radio. En mi caso flaquea la noche, sobre todo la hora de acostarse que después condiciona el resto del día. Si os digo que me he pasado semanas durmiendo un par de horas al día diréis que exagero, pero es totalmente cierto. No se lo recomiendo a nadie, y aunque a veces nos parece inevitable ha llegado el momento de cambiar esa rutina que hace que llegue al fin de semana destrozado.
La noche será para dormir. Me impongo un mínimo de 6 horas y una hora límite para levantarme (en el peor de los casos) en las 8.30. Esto significa que no debería de dormirme más allá de las 2.30.
Respecto a la alimentación me estoy dejando llevar por la comodidad sin abandonar la salud. El desayuno está controlado, fuerte y siempre el mismo. Almuerzo y merienda dependen de la buena de Inés y los bocadillos que nos preparan ella y su hermana en la cafetería de la uni. De la comida se encarga María, que nos alimenta saludablemente.
La cena. Debería de tenerla controlada desde que me levanto, no improvisarla en el momento.
Los entrenamientos han quedado algo abandonados, hago algo de vez en cuando pero quiero exigirle un poco más. Poner unos días y cumplirlos. Pueden ser por ejemplo...todos. Aérobico y al siguiente anaeróbico. Si se falla ese es el día de descanso, pero fallar lo menos posible.
La lectura. Es mi verdadera asignatura pendiente, temo que mi pensamiento se empobrezca por ello y para leer hay que buscar momentos de soledad, hay que recuperarlos.
Escribir. Últimamente escribo y algo curioso. Antes de meterme en la cama escribo la fecha y trato de escribir unas lineas pero el sueño me atrapa. Creo que se debe a una extraña tranquilidad y aunque las hojas quedan con mucho espacio en blanco, esa docena de palabras consigue relajarme.
Trabajo. Si llego lo suficientemente descansado, me alimento correctamente y leo lo que necesito, el resto irá solo. Quizá añadir que hoy es una excepción en la que escribo antes de ponerme a trabajar.
Primero el trabajo y luego el placer (al menos en una escala temporal).

Ideas que sirven para todo

Mientras caminaba oculto de la lluvia bajo mi capucha me he dado cuenta de algo que me ha arrancado una sonrisa. Las ideas que he ido depositando en este blog, que en su día tenían la misión de sacarme de un agujero muy concreto en realidad sirven para otras clases de problemas. Pueden ayudarte a superar lo malo, pero también a encauzar lo bueno. Me explico.
En el fondo hay situaciones que te alejan de tu centro, que despuntan tu rutina, que te vuelven un poco loco. Es como si de pronto vivieras con la cabeza bajo el agua y fueras incapaz de ver lo que hay fuera de ella, perdiendo la perspectiva.
Todos tenemos claro que ante una situación negativa es necesario hacer algo pero suele ser más complicado darse cuenta de la necesidad de un centro, cuando lo que nos ocurre se podría calificar de maravilloso.
Es entonces cuando hay que atacar con las ideas previamente mencionadas en lo alto, con determinación, para no dejar de ser nosotros ni en el cielo ni en el infierno.
Por ello, como tantas veces, hoy será el día 0.
No me pesa volver a empezar conmigo mismo, en realidad es una batalla que nunca termina, que comienza de miles de maneras y en ella reside la gracia de la vida.
Lo que realmente importa no es lo que se deja de hacer, si no lo que se hace.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Como el turrón en navidad

O lo que es lo mismo, he vuelto.

Llevaba semanas en otro mundo, bastante lejano a este, quizá intentando hacer demasiadas cosas, robándole horas al sueño. Durante el día, un velo de cansancio cubría mi mente, volviéndome más lento, más torpe. Cada noche dormía menos hasta que al fin llegó el sábado, terminé al mismo tiempo con todo aquello que me impedía dormir y hoy, tras ocho horas de sueño vuelvo a sentirme yo mismo. En realidad lo sentí ayer por la noche de camino a la habitación, cuando la decisión de descansar estuvo tomada.

Se supone que la cara y el cuerpo son el espejo del alma y pese a no haber dormido ni una cuarta parte de lo recomendado por las autoridades sanitarias, me siento mejor que nunca, deseoso de retomar las rutinas de entrenamiento, lectura, escritura, trabajo y alimentación, un poco abandonadas pero no olvidadas.

Podemos dejar de dormir durante un tiempo, pero solo eso. Cada vez se nos hace más difícil pensar, disfrutar, decidir, terminar los trabajos a tiempo, relacionarnos adecuadamente...por eso, siempre que se pueda hay que procurar respetar las horas de sueño en lo posible, no dejarse seducir por planes alternativos porque el mañana acaba por llegar.

jueves, 8 de noviembre de 2007

Porqué no escribo en el blog

Últimamente escribo casi exclusivamente pidiendo perdón por no escribir y hoy también va a ser un poco así. Estas semanas mi vida se ha acelerado hasta límites insospechados, olvidando descansar lo suficiente, perdiendo quizá mi antiguo norte, el que ahora trato de recuperar pero no es fácil. Hoy otra vez, no escribo para mí, ni para todo el mundo, te escribo a ti, anónima, para decirte que no es que no tenga qué escribir, si no que los pensamientos que rondan mi cabeza no tienen lugar en este blog. Algún día entenderé lo que está ocurriendo, podré clasificar mi repentino exceso de sensibilidad.

Son muchas las cosas que me callo esta vez.

El tono ha cambiado, puede que porque yo también me siento diferente.

Este lugar me relaja y prometo volver a él, como la persona que lo inició.

Esta noche me callo mucho, algún día lo escribiré.

jueves, 1 de noviembre de 2007

idea60: tu alrededor.

Últimamente lo hacía inconscientemente, pero fue una amiga el otro día la que me hizo caer en la importancia del hecho. También se sumó el comentario de mi padre sobre aquellas personas que trabajan en un mostrador y que los que pasan cada día no ven, como si fueran invisibles. Personas que en su puesto del trabajo no tienen ni un segundo de intimidad, con lo que supone eso.
Aran me dijo que le parecía muy importante relacionarse con esas personas que en realidad forman parte de tu vida. No sólo por los favores que te puedan hacer, si no porque están ahí, a tu alrededor, compartiendo espacio y horas junto a ti, pero a la vez es posible que su visión de la vida, sus problemas, sean completamente diferentes a los tuyos, lo que te puede hacer a su vez mirar tu existencia con otros ojos, relativizar tus problemas.
Siempre estamos más dispuestos a escuchar a Platón, pero a veces la señora de la limpieza, que tiene nombre (Loli en la resi y Yoli en la uni), a veces está más cansada, no le renuevan, que si no puede coger la baja, que si está enamorada de su hogar, si le gusta bailar,...puede aportarte más que todos los filósofos de la historia juntos.
Cuando el discípulo esté preparado aparecerá el maestro y este puede adoptar inumerables formas.
Además es una manera de ser abierto con todo el mundo, de profundizar, de interesarte por los demás, de ampliar tu sonrisa, de sentirte cómodo en más sitios cada vez, más natural en todo momento, y eso relaja, enriquece y embellece.
Un abrazo

idea59:Poder mirarse al espejo

Es cierto que ya no escribo tanto aquí, que pasan días entre una entrada y la siguiente, pero sería absurdo forzar la escritura de un blog titulado "ser feliz no estar siempre contento", como que atenta contra su esencia ¿no?
Pero también es cierto que le debo mucho a estas palabras, a los comentarios que habéis ido dejando. Porque surgió como una manera de conocerme y mejorar mi vida que cambiaba y sigue cambiando y ha cumplido por entero su propósito, que a la vez nunca acaba de terminarse porque cada día "la aventura vuelve a empezar".

El otro día pensé que la felicidad tiene que ver con poder mirarse al espejo, sin desviar la mirada, sin arrepentirse de lo que se es. Hubo un tiempo en el que no siempre sonreía a mi reflejo y gracias a estas ideas y a un poquito de todo, me he colocado en un camino que me está conduciendo a mirarme sin miedo en el espejo.

Esta es una entrada de reflexión, de valoración tras dos meses de blog, aunque las fechas nunca encajen, como el invierno que llega cuando quiere.

Ayer alguien me dijo "vamos a cambiar el mundo" y aunque lo veía complicado ahora mismo pienso que el mundo de cada uno se puede cambiar.

Un abrazo para todos los que cada día me enseñáis tanto.

sábado, 27 de octubre de 2007

Para mi anónima!!!

Cierto es que llevo unos días en los que no soy demasiado constante escribiendo aquí y quizá por ello esté perdiendo la atención de quien me ha acompañado desde las primeras letras, en ocasiones dando ella las lecciones que gustoso escuchaba.

Hace días que no sé nada de ti, así que esta entrada va destinada únicamente a que des señales de vida y de pasó también alguna pista más sobre ti.

Un abrazo, espero leerte pronto.

miércoles, 24 de octubre de 2007

cada vez más deporte

Supongo que a quién le de por leer la evolución de mi vida deportiva estos dos meses le dará también la risa. Es como un eterno empezar, que sí, que ahora es la buena y así todo el rato.
Pero lo cierto es que todo este deporte es acumulativo, que el cambiar de juegos no hace que se olvide lo aprendido y que ahora me ha dado por hacer más pesas y cuidar un poco más la comida, con vistas a no perder peso, a ponerme un poco más cachitas.
Ayer pesas con algo más de intensidad que hasta ahora, y hoy me escapado a correr por el monte. No más de media hora que no me interesa ser Martín Fiz.
Esta entrada tan solo para animarme a seguir.

idea58: después de la tormenta...

Llevaba meses preparándome para un mal momento, aguardándolo en mi trinchera, eludiendo los caminos que me pudieran conducir a él y al final, casi sin darme cuenta, caí en las redes de unas canciones cargaditas de recuerdos, unas fotografías de otra época y un cielo nublado.
Parecía una verdadera epidemia ya que mis amigos me llamaron llorando, tristes, buscando compañia, consuelo y casi no pude ocuparme de mí mismo, lo cual esta vez, me vino mejor que bien.
Ya era tarde para intentar revolcarme en mi tristeza así que me dormí y por lo visto los malos sentimientos se han debido de esfumar mientras dormía.
Es que a veces es mejor no tomarse demasiado en serio.

miércoles, 17 de octubre de 2007

Disfruta la fruta!

Esta temporada no estaba comiendo apenas fruta así que ayer compré un montón de manzanas y de plátanos y me puse como objetivo que no se me estropeara ni una pieza.
Hoy ya he comido tres y aunque la fruta no sea ninguna panacea (son hidratos que te hacen engordar igual si abusas de ellos), tiene un montón de minerales que me hacen falta.
Es otro hábito que se cuela casi sin hacer ruido y que me va devolviendo poco a poco al camino de la salud y el bienestar.

Marina

Del mismo autor que la Sombra del Viento (Carlos Ruiz-Zafón), una historia diferente, con el mismo sabor, más agridulce si cabe.
La leí temeroso de que manchara el recuerdo tan maravilloso que guardo del anterior libro, pero no me defraudó. Quizá se note que lo escribió antes, por la repetición de algún recurso literario, pero cuando la historia es buena, lo demás no es tan importante.
Se lee en un suspiro, apenas tiene 300 páginas y no soy el único que ha confesado haber llorado leyéndolo.

La sombra del viento

Barcelona en sumergida en la posguerra de nubes y ceniza, de libros antiguos, desde la mirada de Daniel Sempere, un niño de 12 años, hijo de librero viudo, que conoce la ciudad y se enamora de una mujer y sobre todo de una historia a lo largo de la novela.
No conozco a nadie a quien no le haya parecido sencillamente delicioso y lo haya devorado desde la primera página.

1984

En segundo de carrera lo leí de un ejemplar muy antiguo, con las páginas descoloridas por el tiempo. La letra era quizá demasiado pequeña para mi gusto y tras leer los primeros capítulos pensé que no me atraparía.
Una vez más me equivoqué. De esta manera encontré el mejor libro que he leído en mi vida. Escrito en 1944 por un comunista desengañado con la guerra, con los suyos, con una humanidad que según él nos conduciría a un futuro como el que describe con todo lujo de detalles en 1984.
Su mundo es una pesadilla que me recuerda demasiado a nuestra sociedad.
Leerlo es obligatorio.
No verás el mundo de la misma manera después de hacerlo.
Os recomendaría leeros antes el prólogo en la que dan una sucinta biografía del autor. Ayuda a comprender la obra

El perfume

Como todos los buenos libros, no trata de algo claro. Si podría decirse que es la vida de Jean Baptiste, pero hasta ahí. Quisiera escribir sobre él pero sin destriparlo y al mismo tiempo pienso que es casi imposible ya que es la forma en la que está escrito, su manera de vivir la vida a través de los olores lo que te empuja a devorarlo.
Sólo un apunte. Cuando salió la película vi la primera escena y la quité. Debe de ser buena por lo que me han dicho pero temía que me decepcionará. Me parece tan complicado plasmar la historia en la gran pantalla...
Comencé a leerlo y me aburrí, como me ha pasado con todos los grandes libros que he leído. Lo intenté una segunda vez pero no debía de ser el momento adecuado. Sabía que era bueno y a la tercera vino la vencida. Lo devoré en dos días, es una auténtica delicia.
El perfume, historia de un asesino.

idea 57:Cuando crees que ha pasado la gripe.

Al romper con mi chica de toda la vida, no sabía muy bien cómo me iba a sentir. Porque una cosa es lo que uno cree que va a ser y otra muy diferente lo que ocurre en realidad. Aunque fuera la primera vez que pasaba por una situación de esta índole, quise evitar los picos de tristeza y nostalgia que supuse acompañarían el proceso y comencé a escribir este blog.
Por las mañanas procuraba no pensar en nada o sabía que no podría levantarme de la cama así que me puse una rutina, que consistía en afeitarme, ducharme, vestirme y desayunar casi como un autómata, para no quedarme en pelotas frente al espejo mirando unos ojos tristes.
Reduje el ritmo en el trabajo, porque notaba que mi cabeza no era la de siempre pero procuré distraerme el mayor tiempo posible.
En el deporte cambié mis objetivos de competiciones...por entrenar un poco más suave, a poder ser en compañía y de una manera más lúdica, con el fin de llenarme de buenas sensaciones y seguir con las distracciones que tan buen resultado me han dado.
De vez en cuando me dedicaba unos momentos de soledad en este blog, evitando pensar en nada más que en aquello positivo que me hubiera ocurrido y así, poco a poco han ido pasando los días, hasta hoy.
Desde el primer momento me planteé la ruptura como un proceso gripal, ante el que tienes que cuidarte de una manera especial y tomar las sensaciones (tristeza=fiebre) con naturalidad, como si fuera normal que al romper doliera y no intentar revelarte contra los bajones con frases del tipo ¿pero qué me pasa?...
Por otro lado guardaba una experiencia anterior de que en la ausencia de una persona todo lo relacionado con ella parece maravilloso y nos olvidamos de aquellos pequeños "peros" que en su día nos hicieron tanto daño. Procuraba evitar esa clase de pensamientos y en resumen, dirigir mi mente hacia cualquier tipo de distracción.
Hace unos días olvidé todo lo que acabo de escribir, que todavía tenía gripe y el mazazo fue instantáneo.
Nadie sabe cuánto duran estos procesos, ni lo que ocurrirá durante y tras ellos, pero la verdad siento que estas pequeñas indicaciones me han hecho mucho bien.
Por si a alguien le son de ayuda

martes, 16 de octubre de 2007

qué poco duran mis planes, snif

No hay nada como planear divertirse, te da una doble satisfacción ya que además de la proporcionada por la propia diversión está la de cumplir con tus objetivos.

Escuchando a otros me doy cuenta que a veces el ocio, el cuidarse a uno mismo, se convierte en algo tan serio que deja de divertir y todo parece importante, lo que comas, lo que no, si haces este ejercicio de tal forma...

Por fin me he dado cuenta de que todo eso da un poco igual. Que simplemente hay que moverse un poco y no comer basura, sin darle más importancia que la que tiene, buscando la diversión en cada acción, sin verguüenza y con los menos prejuicios posibles.

Hoy ha tocado de nuevo baloncesto y mañana ya se verá.

En verano casi no pensaba en entrenar, simplemente hacía algo por la mañana, sin cansarme y toda la tarde la pasaba jugando a volley en la playa. Los resultados son todavía mejores pues al estar serio se acentúan unas arrugas que nada tienen que ver con las producidas por sonreir.

Sin apenas planes que duren seguir divirtiéndome puede ser uno muy fácil de cumplir.


Idea56: Se tu mejor amigo

Anónimo aconseja que ante problemas sentimentales pienses en lo que aconsejarías a un amigo que se encontrase en tu situación y te apliques el cuento.

Como idea me parece tan buena como difícil me está resultando aplicarla.

¿y qué le diría yo a mi mejor amigo?

En situaciones como ésta la respuesta puede ser muy personal, así que lo dejo aquí para que cada uno, si quiere, pueda contestarse.

lunes, 15 de octubre de 2007

Otro comienzo

No tengo miedo a caer, porque sé que volveré a levantarme.

Tras mis renovados propósitos de hace unas horas he entrenado como un campeón durante hora y media y me siento derrotado físicamente, repleto de cansancio del bueno, listo para recenar un yogur e irme a la cama.

Por otro lado me retiro antes de tiempo a mi cuarto, más temprano que el resto de días, dispuesto a recuperar la lectura que lleva semanas abandonada y el sueño que llegaba con retraso.

Tres pájaros de un tiro para reencontrarme con el Adrian tranquilo que aunque no ha hablado de la oscuridad hasta ahora, agradece el primer destello de luz.



domingo, 14 de octubre de 2007

idea55: llegó la hora

Bueno, llegó la hora de exigirse un poco más.

He pasado una racha delicada por temas sentimentales de los que no he querido hablar en este blog, por eso de transmitirme a mi mismo ideas positivas y alejar fantasmas que pueden destrozarte por dentro si no les pones freno.

He tratado de estar lo más entretenido posible y trabajar un punto por debajo de lo habitual ya que sentía que no podría hacer frente al ritmo de siempre y que necesitaba un tiempo cada día para relajarme y respirar profundamente.

De la misma manera siento que ha llegado la hora de dar un poco más de sí.

Nada especial, simplemente ser más regular en los entrenamientos, llevar una alimentación algo más equilibrada y trabajar con algo más de cabeza. Volver a meter quinta en esos tres aspectos, porque sé que lo demás viene solo.

ALIMENTACIÓN:

5 comidas al día, ricas en proteínas, carbohidratos sanos (frutas y vegetales) y pobres en grasas de las malas (bollería...).

ENTRENAMIENTOS:

3 entrenamientos de pesas y el resto ocio (baloncesto patinar). No fallar en las pesas.

TRABAJO:

Centrarme en mi tesis doctoral dando un poco más de mí.

DESCANSO:

Acostarme antes, ya que después arrastro el cansancio todo el día y eso me impide cumplir los objetivos.

idea54: no seas demasiado duro contigo

Últimamente y me refiero a un puñado de días, no tengo las mismas fuerzas que antes. Puede que se deba simplemente a lo poco que duermo, al constipado o a algún raro tipo de criptonita que afecta a aquellos que se miran demasiado el ombligo.

Reconozco que ha habido épocas en las que he trabajado y entrenado más. Temporadas en las que escribía, soñaba con grandes gestas y mis pasos me acercaban a ellas.

Hoy por hoy, me cuesta un poco más de lo que es habitual en mí mover el culo para todo aquello que pueda influir positivamente en mi futuro a medio plazo y me dedico a vagar entre baloncesto, patines y risas, sin casi darme tiempo para estar conmigo.

Parte del peso que siento en la espalda se debe a todo lo mencionado hasta ahora, pero hay una fracción, no sé si muy grande o muy pequeña, que se debe a la mirada de desaprobación que me dedico por mi gandulería.

Vale que tendría que hacer algo más pero después de las machadas que me he pegado en ocasiones, quizá debería de ser algo más flexible y permitirme esta pequeña licencia de holgazanería que tampoco es así.

Quizá simplemente algo dentro de mí necesite cicatrizar, curarse y para ello no haya más camino que éste. Me daré un voto de confianza y no seré demasiado duro conmigo mismo y como hago con otras personas, me daré tiempo.

sábado, 13 de octubre de 2007

Supervivencia

Llegó un amigo al que cada vez me siento más unido. Una de esas personas que no ves en mucho tiempo y con la que sin embargo no te falta conversación, ni puntos en común, ni razones para reirte.

De noche, en un bar maravilloso, que es más un santuario y comenzamos a hablar. Ellos no le conocían y yo tampoco tenía ni idea de lo que nos iba a contar.

Se trata de un gran deportista que con toda probabilidad hubiera llegado a profesional de la pelota si no fuera por su mal de manos. En los últimos años se ha dedicado a seguir entrenando, a la montaña, mientras terminaba la carrera de IVEF (deporte). Viajó a Sudamérica y subió varios montes. Estuvo solo y en compañía, meses, rodeado de gente con verdaderos problemas, de parajes tan mágicos como desoladores. Podría escribir todo el día sobre lo que no dijos, pero me limitaré a dejar unas pinceladas que creo, son suficientes para entender lo que vivió.

En uno de los viajes iba acompañado de otro amigo y se perdieron en las montañas, en Argentina. Los dos pensaban que al otro le quedaba algo de comida y se vieron en medio de la nada, con poco más que leche en polvo para llevarse a la boca. Así pasaron 5 días en los que tuvieron que comer hierba, dormir en el mismo saco para entrar en calor ante una sensación térmica de 45 grados y animarse en todo momento para no sucumbir al desánimo y a una muerte segura.

Llegaron a un río que caía desde 6000 metros con una fuerza enorme. No podían volver hacia atrás, habían perdido más de 10 kilos en 20 días y habían perdido las cuerdas. ¿Cómo atravesarlo?

Se abrazaron sabiendo que podían morir en aquel lugar, se despidieron y tras buscar el lugar menos peligroso para hacerse al agua se zambulleron.

Mi amigo, Aritz, baja la mirada al recordarlo. Dice que vio como el otro iba directo a las rocas, creía que éstas le sacarían las tripas y al final los dos se salvaron, a pesar de ser arrastrados más de 200 metros por el agua.

El otro le engañó diciéndole que cerca había un pueblo, para animarle y cuando llegaron encontraron un desierto, pero al final sobrevivieron.

Es un hombre grande, muy fuerte, que se come una barra de pan sin inmutarse antes de comer. Pero allí le cedía la comida a su compañero al que veía más débil y lo mismo hacía el otro. Esa clase de situaciones te cambia, dice.

En otra ocasión lo atracaron en la montaña. Iba solo, y a punta de revólver le quitaron todo menos lo que llevaba puesto. Continúo caminando pensando que podría morir hasta que econtró un caserío. Aquellas pobres gentes lo acogieron y tras marcharse a los días, volvió con las medicionas que tenía en otro pueblo para dárselas a sus benefactores, que incluso, le cedían la cama (fardos de hierba) de sus hijos para que durmiera allí. Dice que le es quiere como a su familia.

Una vez, escalando en hielo iban atados tres montañeron por lo alto de un risco. Él se cayó al vacío por un lado de la montaña, y su compañero tuvo la sangre fría de tirarse al otro lado (era una cima), para compensar su peso y evitar que se cayeran los dos. El tercero los subió, pero imaginaros la situación, cada uno suspendido a un lado de la montaña y el tercero anclado con el piolet teniendo que subir a los otros dos.

Dice que allí todos ayudan a todos, que no hay egoistas, que la gente te da todo lo que tiene y que cuando llegas aquí recuerdas lo aprendido pero que a los tres meses sucumbes a esta sociedad consumista.

Te queda una señal de lo vivido, que te hace más tranquilo, más humilde, menos agresivo.

Él está cambiado, es como conocer de nuevo a quien ya creías conocer.


martes, 9 de octubre de 2007

Cambio de planes

Hace unas semanas ya dije que no competiría ni en judo ni en atletismo.

De hecho ni entreno ni voy a correr.

No he vuelto a jugar al ping-pong ni al baloncesto, quizá mañana, es posible.

Hago algo de pesas, que tampoco mucho, pero es más que nada.

Y sobre todo me encuentro en forma, aunque no podría explicar porqué.

Hoy he vuelto a patinar, con la garganta algo irritada, habiendo tenido fiebre ayer y me he sentido realmente vivo.

En forma y como un niño, como si la edad no importara, como un ser atemporal.

Un flipado, un friki, quizá, pero en los razonamientos más absurdos me parece darme de bruces con la esencia de la vida.

El plan es que no hay plan, que ya no vuelvo a correr mañana ni pasado mañana.

Que no escribo un poco para que se vaya sumando a lo del día anterior.

sueño despierto y dormido. Cada momento cuenta, pero sin agobios, sin presiones, porque cada día podría ser el último y si no lo es tampoco es que queden muchos.

Tengo varios libros en la mesilla empezados y ya no sé cuando acabaré alguno de ellos.

Hoy he vuelto a patinar, mañana quién sabe qué pasará.

A la deriva

Una película puede devolverte a otra época, removerte las entrañas y demostrarte que no has superado nada de lo que te atrevías a llamar pasado. Perdido en mitad del mar mirás el sol y sonríes, sintiendo una especie de rara empatía por ti mismo.

En un momento encuentras la poesía en la historia de tu vida y te sientes tan pleno como desnudo de toda posesión.

Este soy yo, con mis alegrías y mis miserias.

Un chispazo en la oscuridad,

la insignificancia hecha persona,

y al mismo tiempo soy todo lo que tengo...y me caigo bien.

Hoy patino en la oscuridad, veo películas, charlo y paseo.

Pienso que hoy es hoy, mientras me mecen las olas.

lunes, 8 de octubre de 2007

idea53: Una semana de locura, hoy que se pare el mundo

Cada día escribía aquí y casi sin darme cuenta, paso una semana sin dejarme caer por este blog, mitad por trabajo mitad por placer, aderezado con falta de sueño y un poco de fiebre.

Hay veces que la vida va tan deprisa que no te da tiempo ni para recordar aquellas cosas que dabas por aprendidas.

Una semana sin leer, sin entrenar, casi sin dormir y hoy porque he decidido detenerme y quedarme aquí...

De vez en cuando es necesario parar, quedarse a solas y dejar nuestro cerebro se solidifique, que los recuerdos se ordenen y las sensaciones se pongan de acuerdo.

Esta tarde es para eso, esta hora mejor dicho, pero ya está haciendo su efecto.

Tenía planes de trabajo, pero me parece que me daré un respiro de todo y me iré al cine, a ver una peli en versión original, a ver si por un casual aprendo algo de inglés y desaprendo algo de lo que me sobra.


sábado, 29 de septiembre de 2007

Declaración de intenciones

Hasta que no te quedas un momento contigo la inspiración no acude en cualquiera de sus formas.

Esta vez ha sido Fito y su "casa por el tejado" y Macaco con "las manos levantás" y "pa la tierra".

Y es que si algo he aprendido es que hay cosas que es mejor no aprender, que el pasado no existe y el futuro dicen que pende de un hilo. Con los ojos bien abiertos por el mundo, tranquilito y dejándome llevar...y puede ser que la respuesta sea no preguntarse porqué.

Pereza y su "alegría más tonta" y es que que vivan los idiotas, lo absurdo y que se maten ahí fuera.

Tengo la sensación de que llevo toda la vida haciendo el tonto, pensando en los demás, yendo con prisas de un lado para otro sin llegar a ninguna parte, dejándome atrás y aunque sean solo unas palabras, es el principio. Digo que se acabó.

No pienso ir detrás de nadie, quien quiera algo, que se lo curre.

De ahora en adelante venderé cara mi piel.

La lucha ha comenzado.

idea51 ó el fabricante de tornillos

Cada mañana tenía que fabricar 500 tornillos.

Al mediodía mostraba 350 y guardaba otros 200 que ya tenía hechos en un rincón.

Volvía por la tarde para llegar a esos 500 pero como ya estaban hechos no hacía nada y cobraba gustoso esas horas.

Al final de la jornada entregaba 500 tornillos, ni uno más, porque si no comenzarían a exigirle 501 cada día y ni uno menos, para que no pudieran quejarse de él.

La siguiente mañana la afronataba con 50 tornillos en su rincón y volvía a hacer lo mismo que el día anterior.

Al finalizar el año había hecho cientos de miles de tornillos, sin para ello tener que sentirse agobiado, trabajando contra reloj.

Cuando las reglas que hay no nos convencen quizá sea el momento de crear las propias.

jueves, 27 de septiembre de 2007

idea50:disfrutar de la soledad

Uno se acostumbra a todo. Los primeros días en una ciudad a callejear en soledad, a pasarse horas sin abrir la boca, a entretenerse con uno mismo. Después, si todo va bien, suele llegar el cambio, el salir a diario, la compañía constante.

Somos capaces de adaptarnos a dichos cambios en un puñado de horas, a lo sumo de jornadas y el peligro radica en "entrar en la dinámica". Porque llegas a casa al anochecer, tras muchos días de febril vida social y casi es como si no tuvieras un plan para ti que no incluyera a alguien más.

Aprovechar esos momentos de soledad, aprender a disfrutar de uno mismo, a no depender de los demás en todo momento, puede convertir la espera a que suene el teléfono en un instante de incalculable gozo.

Ayer llegué tarde para todo, para el plan de ir a correr a las 8, para el de salir a las 10. Elegí unas canciones, unos ejercicios y empecé a entrenar, suave al principio, más fuerte después. Al poco ya no me acordaba de nadie ni de las 14 horas que había estado en el laboratorio.

Cené y apenas pude leer el libro que tanto me está enganchando porque caí en un sueño reparador.

lunes, 24 de septiembre de 2007

idea49; el poder de la cerveza sin alcohol

Con 17-18 años (la edad de mis nuevos vecinos...qué viejo soy), traté de empezar a salir sin beber alcohol, un tanto enfadado por la manera en la que el hábito de beber había hecho presa de mí.

Recuerdo como me tiraron la coca cola unos amigos, el aburrrimiento, la vergüenza ajena y como más tarde acabé por pedirme una copa. Fue una derrota silenciosa, pero de las que no se olvidan.

De eso han pasado 7 años y por el camino toda clase de fiestas. De pronto, hace un tiempo, salí y no bebí alcohol. El ambiente me caldeó y no lo eché en falta. Al siguiente sábado ocurrió lo mismo y así sucesivamente.

Fui más yo, conocí a gente que tampoco estaba borracha, controlé el entorno y a la mañana siguiente, a pesar de no haber dormido mucho, sin resaca ni mal aliento, pude sacar adelante un día de trabajo como si la noche anterior me hubiera acostado a la hora de siempre (que ya suele ser bastante tarde).

Por si fuera poco, la gente de mi alrededor que bebe alcohol casi a diario está sufriendo unas metamofosis físicas nada envidiables.

Los de vez en cuando no tienen demasiada importancia, creo yo, pero es vital elegir los hábitos.

¡Viva la cerveza sin alcohol!

Tripita

Casi sin darme cuenta he descuidado mi alimentación. Día tras día he ido haciendo una excepción por comida, algunas veces auténticos excesos, como merendar dos veces y cenar dos veces menús increíbles.

Al mismo tiempo he hecho menos deporte del habitual y me parece impresionante la velocidad con la que el cuerpo pierde (o gana) las formas que se habían endurecido tan rápidamente, todo hay que decirlo, al tomar buenas rutinas.

Tomar y tomar, ahora toca retomarlas.

Cuernos y bofetadas

Tuve un sueño horrible.

La ciudad en la que vivía estaba inundada y las ballenas nos deleitaban con sus chapoteos. Orcas y ballenas azules aplaudidas desde balcones futuristas. Pocos hablaban mi idiomaa y convivía con mi abuela en un piso como el que tuvimos, pero más grande, tanto que yo tenía mi propio cuarto para estar con mi novia, con la que por lo visto, había discutido.

Mi abuela me advertía de que me había sido infiel y al ir a la habitación donde solíamos hacer el amor, me encontraba con preservativos extragrandes y toda clase de evidencias de sexo en mi ausencia.

Me dolía muchísimo que me mintiera a la cara al preguntarle y le daba una bofetada, de esas que duele más por el hecho en sí que por la mano.

Más me dolía que me la devolviera, su gesto, convencida de que yo no le pertenecía, totalmente carente de amor hacia a mí.

Me quedé una hora en la cama diciéndome a mí mismo que los sueños sueños son.

Pero sobretodo pensaba en aquellas bofetadas. En la mía que no creo que se la diera de reproducirse esa situación en la realidad, en el dolor que me provocó su manotazo y su mirada.


idea48: todo tiene arreglo

Este blog surgió hace unas semanas, al inicio de una época crítica de mi vida. Una era de cambios, de decisiones, de novedad, de ratos buenos y menos buenos. Me prometí que escribiría siempre desde el optimismo, que no me enredaría sobre los temas que apuntalaban mi cabeza y que intentaría que mis palabras me ayudasen a mejorar mi día a día.

Pero como todos, tengo días peores que otros, momentos en los que no me siento tan dueño de mi vida, y en las que soy algo duro de oído ante los buenos consejos.

Hay veces en las que algo nos duele, en forma de amor, miedo, rencor...y no deseamos huir de la sensación. Aunque no sea agradable la sentimos como nuestra y abrazamos sus espinas.

Me gusta creer que incluso de esos momentos se aprende, que enriquece vivirlos, poder decirte a ti mismo "he sufrido por amor, ya sé lo que es", pese a que seamos capaces de tropezar, retropezr y reretropezar en la misma piedra, ni siquiera en una parecida, si no en la misma.

Hay momentos de crisis en los que el sol desaparece, pero es como las tormentas de verano que se esfuman nada más haber descargado su fuerza sobre nosotros.

Todo tiene arreglo y el tiempo en este caso es nuestro aliado.

idea47: cambio de planes o flexibilidad II

Llevaba meses preparándome físicamente para competir en judo y en atletismo.

Ha llegado el momento de poder entrenar, de federarme y no he tenido ni que planteármelo.

No me apetece.

Me supone demasiado esfuerzo contando las demás cosas que tengo que hacer, el tiempo libre del que dispongo es limitado y quisiera hacer otras cosas como jugar al ping-pong, correr, baloncesto, patinar...la palabra clave es JUGAR.

De esta manera los retos deportivos pierden en seriedad, en sacrificio. Juego como los niños en las épocas estivales, despreocupado, entregado.

Mis planes han cambiado y no siento que me haya fallado, al contrario, estoy haciendo en cada momento lo que me apetece, divertirme, sin dejar de moverme y darle un poco de juerga deportiva a mi cuerpo, que la necesita como el comer.

jueves, 20 de septiembre de 2007

idea46: que no te cambien.

En medio de una de esas conversaciones en las que cada uno expone los problemillas que tiene en mente y se acaba por hallar un punto de encuentro entre situaciones que en un principio no tenían demasiada relación, he tenido la suerte de escuchar una reflexión de las que merecen realmente la pena.
"Cada uno es cómo es y no vas a poder cambiarles, pero por lo menos que no te cambien a ti".
Me gusta la frase porque implica aceptar a los demás como son, comprender que vuestras opiniones no tienen porqué coincidir, ni hay porqué crisparse intentando convencer de nada a nadie y te ofrece la idea de enfocar tus esfuerzos en la clase de momentos donde está frase encaja en seguir siendo como eres, sin dejar que te cambien.
Es una manera de estar tranquilo frente a los demás, sus opiniones y hacia ti mismo.

martes, 18 de septiembre de 2007

idea45: nunca estarás sol@

Tantas veces nos creemos que nuestros problemas son diferentes a los del resto, que nadie se ha sentido como nosotros con anterioridad y eso no hace más degraciados todavía.
Aunque en algunos aspectos sea una pena, siento deciros que no somos especiales, que todo lo que vivamos le ha sucedido a millones de personas (si, si, millones) antes que a nosotros y que probablemente en toda nuestra vida no hagamos nada nuevo, nada único.
Todo está inventado.
Pero esto también tiene su lado bueno y hace que cuando la historia se nos tuerce podamos encontrar a otras personas en nuestra misma situación, en el curro, entre cervezas, cafés, series del gimnasio...o entre los libros.
Abrirse y escuchar nos puede poner en nuestro lugar, acompañarnos en una tristeza que mengua al verbalizarla, al compartirla, ya sea en boca de otros o en sus letras.
Nunca estarás sol@.

idea44: pasotismo constructivo

Ayer por la noche pensando en la derrota sufrida por la selección española en la final del eurobasket, recordé sus caras tristes, desolados por haber fallado el último tiro y me asaltó la siguiente idea:
¿Qué más da quedar segundo o primero?
Entiendo la competitividad, me encanta el deporte, pero de verdad...¿qué importa que ese tiro entre o no? no pregunto que cambia en desarrollo de la historia (eso lo dejo para algún comentario), si no en la misma vida de los implicados. Seguirán jugando al baloncesto, cosechando triunfos y derrotas, pero en realidad, en lineas generales todo seguirá igual.
Y siguiendo con este qué más da se me antojan mil ejemplos de en mi vida cotidiana, situaciones que podrían parecer urgentes, llegar a sentir cierta angustia por ellas y en realidad qué más dan.
No digo que no luches por la victoria con ahínco, por puro disfrute, pero ante la derrota, elevando un poco la vista, tratando de ser objetivo no se me ocurre otra cosa qué decir:
¿y qué más da?

¿Dónde están las pesadillas?

Basta que hoy me atreva a escribir estas palabras para que mañana me despierte bañado en sudor frío, temiendo que una garra rasgue la colcha en busca de mi sangre, pero...¡ya no tengo pesadillas!

Hasta hace poco el recuerdo de los malos sueños recurrentes me acompañaba gran parte del día, imágenes horribles, de las desgracias que más teme cualquiera en la que los protagonistas eran mis seres queridos.

Llegué incluso a temer el momento de dormirme, como en la película de Freddy que por cierto, apareció en alguno de esos sueños como invitado estrella y eso que la primera película la vi cuando no tenía más de 10 años, y desde eso han llovido mares.

Las pesadillas desaparecieron hace días y ni siquiera me había dado cuenta hasta este momento. Parece mentira cómo se nos olvida lo malo y la vida sigue como si nunca hubiera sucedido.

Y es que como dice Machado...

todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo camino,
camino sobre la mar...

Qué bonitas sus palabras y que bueno poder dormir tranquilo.

A todos los que estéis atravesando un ciclo de pesadillas os digo que sin más, cesarán y hasta su recuerdo desaparecerá.

lunes, 17 de septiembre de 2007

idea43: felicítate, la felicidad en estado puro

Esto no es una idea en sí misma, es un pensamiento positivo, una sensación de fresa...

No dejo de sorprenderme por la facilidad con la que puedo pasar de preocuparme por una tontería a la felicidad más pura y total y a la inversa. La vida está hecha para disfrutar, para rodearse de la gente que nos transmita buen rollo y pasar de aquellos que nos bajen de la nube, que nos chupen la energía como vampiros de la vitalidad. Bastante complicada es la existencia cuando se pone a ello como para darle vueltas a tonterías que en frío vemos que no llevan a nada.

El buen rollo es tan contagioso como el mal rollo así que pégate a las carcajadas, a las miradas limpias o aquellas que te digan algo diferente a la envidia, a la competencia, al cotilleo, todo lo demás te sirve.

Y si ya consigues disfrutar de ese entorno social, siendo generoso, riéndote hasta de tu sombra, escuchando y retirándote a tiempo para encontrarte a ti mismo en un libro o en un folio en blanco...

Puede que sea un tipo extraño, pero para mí eso es la felicidad.

Un fin de semana de contraentrenamiento

El entrenamiento se divide en tres factores igual de importantes:

- entrenamiento en sí o actividad física: el viernes dejé la mochila del judo, las pesas y las zapatillas de correr en su sitio, el sábado hice pesas movido por la euforia y el domingo me he torcido los dos tobillos, uno detrás de otro en menos de 5 minutos. Todo un récord que todavía me duele.

- Alimentación: cenar dos pinchos fríos no es cenar. Dos kebaps en dos días son demasiados kepaps. El alcohol no tiene más que calorías vacías. Menos mal que el pollo, el yogur, las proteínas, los bocatas de jamón con ajo y tomate y la salvación en forma de visita de mis progenitores me han devuelto la sonrisa con algo de masa en los carrillos.

- Descanso: creo que el viernes se me olvidó dormir. Aún así el sábado pude entrenar, todavía no me lo explico y prometo no haber consumido ninguna droga ilegal. El resto del fin de semana he descansado algo más y supongo que para quien lea estas palabras le parece un abuelo, pero de verdad que si no duermo no rindo, adelgazo casi al instante y soy capaz de torcerme un tobillo y después el otro.

Espero que esta semana que empieza pueda hacerlo algo mejor


idea42: el ritmo natural (II) ó el placer de no saber

Según el momento y a quién se haga la pregunta, la respuesta a qué es para ti lo peor de la vida puede ser muy diferente (obviemos todas las grandes desgracias ¿vale?)

El aburrimiento te dirá el que está harto de compartir sofá y televisión con su pareja.

O como decía Parker Lewis: "una chica puede decirte que sí y hacerte el hombre más feliz del mundo ó decirte no y convertirte en el más desgraciado. Pero puede ser peor, puede decirte: NO SÉ."

Quizá esas palabras pasaron desapercibidas para muchos, pero a mí me parecen geniales y de lo más afortunadas. El no saber qué pasará puede hacer que te comas la uñas, seguidas de los muñones.

El aburrido del mando a distancia te dirá que lo que daría él por desconocer su futuro cercano y el que mire su móvil con la misma expectación que los beatos a las imágenes de la virgen que sólo quiere saber, si ó no, pero ya por favor.

Yo digo que una vez que se sabe ya no hay vuelta atrás, los sueños se dan de bruces con la realidad y ésta no siempre se caracteriza por la magia que desborda.

Puede que los momentos más intensos y placenteros sean esos en los que echados con las manos detrás de la cabeza soñamos con lo que "podría ser".

Disfruta del placer de no saber.


idea42: el ritmo natural (I)

Otra alternativa a superar los momentos de impaciencia en los que acostumbro a acelerar las situaciones, a privarlas de su ritmo natural y en esta palabra está la clave, en la "naturalidad", provoca que a menudo lo que halle no sea de mi agrado.

Por primera vez estoy intentando que la vida se desarrolle con naturalidad, a no marcar yo el ritmo de aquellas acciones que involucren a más personas, a dejar que tomen sus propias decisiones, y de paso así, poder conocerlas.

No me refiero a estar parado viendo la vida pasar (Como dice Olvido Gara), me refiero a observar, a fantasear y a imaginar lo que se desee pero a no cerrar los ojos a las respuestas de la otra persona.

Porque a veces seguimos hacia delante ignorando señales importantísimimas de los implicados en la situación-relación-acción y huelga decir, que eso es un error.

Dejemos que la vida marque su ritmo y sin dejar que se enfríe tomémosla templadita, con el fin de no quemarnos tanto los labios.

idea41: sms y las horas del día

Hace algunos años se me ocurrió una teoría que aunque discutible no dejan de encontrar divertida los que me rodean. Aunque no sea una buena idea para mejorar la rutina estrictamente, puede que ayude a desentrañar las intenciones de una persona de la que no tenemos demasiada información

Cuando alguien recibe un mensaje de madrugada de una persona que no es su hijo, su padre, su hermano o aquel que te ha dado el bote de la cena, lo más probable, o al menos eso creo yo, es que esté interesad@ en realizar alguna clase de actividad impura contigo.

Si por el contrario el mensaje llega por la mañana, probablemente enviado nada más despertarse, me inclino por pensar que esa persona siente algo más cercano al amor que a la pura atracción física.

Los mensajes por la tarde o al mediodía son más habituales para amistades sin pretensiones, para qué tal y cómo te va.

Haced la prueba, pensad en lo que recibís o enviáis y ya me diréis.

domingo, 16 de septiembre de 2007

idea40: la impaciencia me domina

No sé si escribí con anterioridad sobre esto, pero es algo tan esencial para mí que me arriesgaré a repetirlo.

Hay momentos en los que un nudo atenaza mi estómago y el desconocimiento por el futuro cercano puede hacerme darle un empujoncito. Escribir un email, una llamada que llevaba un tiempo evitando hacer...

El paso está dado y de esa manera consigo salir de la situación de espera hasta el próximo capítulo de mi vida pero la verdad, aunque lo haya hecho una y mil veces, o justamente por eso, me parece un error caer en esa debilidad y no apoyar el paso en una tierra más firme que la propia impaciencia.

Ser fuertes en esos momentos y madurar una idea, tomando la decisión a media tarde que es la más neutral de las horas, me parece lo más apropiado.


idea39: salirse del camino marcado

"La suerte pertenece a los valientes"

No estoy seguro de si la frase es exactamente así, pero teniendo en cuenta de que probablemente se trate de una traducción y de que el sentido es ese tampoco tiene mayor importancia.

Casi a diario la vida nos da la oportunidad de salirnos del camino marcado, de hacer una llamada, de dejarse llevar, de inclinarse por lo desconocido, de elegir el sendero difícil ó simplemente el más misterioso.

Pocas frases encuentro más tristes que una que habré repetido mil veces con resignación y cansacio, "de casa al curro y del curro a casa".

Abrise un poco al mundo, salirse de la rutina puede dar resultados tan sorprendentes que ni siquiera merecen la pena los ejemplos.

Arriesgar puede ser una victoria en sí misma.

jueves, 13 de septiembre de 2007

idea39: saber descansar

Me quedaría escribiendo sobre alguna de las docenas de ideas que tengo apuntadas en los post-it que adornan, ordenador, mesas y mesillas pero el cuerpo me pide cama y le voy a escuchar.

El libro que estoy leyendo afortunadamante no es tan interesante como esperaba, algo a tener en cuenta por quien busca dormirse cuanto antes.

Por cierto, la mujer que me sirve cada día una sonrisa y el primer plato de mi comida me ha dicho que lo que pedía tenía muchos carbohidratos y que aunque no son lo más indicado para adelgazar (que no tiene porqué ser siempre el objetivo), resultan ideales para conciliar el sueño.

Ahí queda ese consejo que nos ha regalado.

Hasta mañana (y apenas son las 23:34, es mi récord).

Descanso forzado por el trabajo

Entre unas cosas y otras, el resfriado y las 12 horas de media en el laboratorio esta semana no he entrenado más que un día, pero no pasa nada, porque queda el viernes, el sábado y el domingo, tres días para terminar con un balance de cuatro días de entrenamiento, que no está nada mal.

Desde el lunes tengo la mochila con la indumentaria de judo preparada. Creo que tendré que airearla un poco antes de ir a entrenar o el tufillo será mi arma más letal.

Pese a todos los pesares, incluido el Kebap que me acabo de zanpar, la alimentación y las mini-siestas me han mantenido a flote estos días.

Las ideas que empezaron como un juego hace ahora diez días, han mejorado mi rutina hasta el punto de hacerla inmune a envites de toda clase.

idea39: volver al tema a destiempo

Tras decir lo que quería, en ocasiones me diluyo en argumentos que nos alejan, tanto a mí como al interlocutor del tema que tratábamos, lo cansan y pierdo la razón que pudiera tener, la fuerza que podían poseer mis primeras palabras.
A veces es mejor decir las cosas una vez y no que por temor a que no se claven en la mente del otro, repetir y repetir...aunque sea empleando otras palabras. Volver al tema que se creía zanjado porque no ha quedado como a uno le gustaría no me ha dado nunca buenos resultados, ya que cuando te terminan dando la razón puede ser por hastío más que por convencimiento.
No sé si se trata de un problema común, pero a mí me pasaba hasta hace poco y desde que lo he corregido (conscientemente y gracias a que trato de controlar mis emociones en las discusiones) éstas son menos traumáticas y más fructíferas ya que escucho más que hablo, cosa que antes no me ocurría, de manera que tengo más posibilidades de llegar a comprender los sentimientos de quien tengo en frente.

vivir en sueños, vivir en la realidad

Para los que estamos un poco locos, existe un eterno dilema, el de vivir en la realidad o en nuestros sueños. No es raro que la imaginación nos conduzca a inventarnos nuevos mundos que nos divierten y a veces hasta nos llenan.
Que vivamos el amor por una persona que no nos hemos cruzado más que en nuestra mente, una mezcla de las virtudes de todas aquellas que hemos ido conociendo. Nos reímos sin razón aparente, soñamos despiertos y dormidos en universo de niebla multicolor.

Pero de vez en cuando se repite el descenso hacia el mundo real, en el que nuestra imaginación pierde potencia y la vista no alcanza más allá de los horarios, las decepciones que sufrimos por parte de los seres de carne y hueso, las prisas en una ciudad donde todo es urgente y nada es importante.

Y entonces pensamos que nuestra vida es una mentira, que la felicidad que nos hemos construido no es más que una burbuja en un desierto de grises y seguimos descendiendo, incapaces de elevar el ánimo, pues no hay peor mentira, que la que nos contamos a nosotros mismos.

¿Pero, quién decide lo que es real y lo que no, lo que importa, lo banal?

¿Qué más da si en la televisión no se anuncian castillos en el aire? Cada uno decide los campos en los que quiere soñar y yo no pienso ponerle límites a mi fantasía, ni restarle importancia a lo que sueño cada noche, a los cuentos que leo y los que escribo.

Si alguien quiere convencerme que lo único que existe es el humo de la ciudad, lo tangible, lo "real", me apiadaré de él.