A veces somos muy duros con nosotros mismos.
Deseamos vivir hacia adelante, dejar atrás aquello que nos duele. Nos negamos a dar un solo pasó en otra dirección que no sea el frente.
Creo que hay pequeños traspiés, pasos atrás que nos pueden impulsar con más fuerza hacia adelante.
A veces a quién más cuesta perdonar un error es a uno mismo.
Seamos indulgentes con nosotros, ya que todo lo que hacemos tiene su porqué.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Adri! Soy yrama! Feliz año nuevo lo primero!
Oie nada, que hace un montón que no estamos y antes me he acordado de ti, te he pegado un toque a la habitación y no te he pillado libre, asi que a ver si saco 10 minutillos aunque sea para un café (o infusión jaja) rápido en la uni para charlar y reirnos un poco, que con tanto estres de examen ya hace falta! te agradecería que me dejaras verte un ratín jejeje!! besitoos!
Contesto el comentario cuando el café ya se ha consumado. Ha sido un rato muy agradable en el que hemos podido compartir risas y anecdotas curiosas que lo han sido tras hablar de ellas.
Cuantas veces se reflexiona mejor en voz alta.
Un beso para Yrama y Julen.
Publicar un comentario